Cuando mi esposo y yo comenzamos nuestra familia, sabíamos que además de adoptar las tradiciones del país en el que vivimos, queríamos conservar en nuestro hogar la cultura mexicana y transmitirles a nuestros hijos el amor por ambos países. Hace cuatro años, cuando el mayor nació, no dudamos en tramitar su ciudadanía mexicana poco después de su nacimiento e hicimos lo mismo con nuestro bebé, hace apenas unos meses.
Comenzaré por el principio, yo soy mexicana de nacimiento y llegué a este país hace casi 10 años; felizmente, hoy puedo decir que también soy estadounidense pues adquirí mi ciudadanía americana en septiembre del 2017. Mi esposo, por su parte, nació en Estados Unidos de padres mexicanos y hasta el día de hoy, solamente tiene la ciudadanía americana pues en aquel momento México no aceptaba la doble nacionalidad.
A partir de 1998, hace 20 años, la Ley de Nacionalidad de México permite que las personas mexicanas cuenten con otra nacionalidad además de la mexicana, esto nos otorga el gran beneficio y responsabilidad de poder tener doble nacionalidad.
Por su parte, la ley en Estados Unidos no menciona la doble nacionalidad o requiere a una persona escoger entre una u otra nacionalidad, por lo que un estadounidense puede hacerse ciudadano de otro país, sin temor a perder su ciudadanía.
Obtener la ciudadanía mexicana habiendo nacido en Estados Unidos, es mucho más fácil de lo que yo imaginaba. Sin importar que mi esposo no es mexicano por nacionalidad, pudimos registrar a nuestros hijos como mexicanos sin ningún contratiempo. Yo no tengo un perfil en leyes ni soy abogada, pero hablaré de nuestra experiencia personal.
Realicé el trámite para mi primer hijo en el Consulado de México en Houston y, a inicios de este año, también realicé el trámite para mi bebé desde el Consulado de México en San Antonio. A continuación, enlisto los pasos que seguí en ambas ocasiones.
- Llenar la solicitud AQUÍ
- Recopilar la documentación necesaria: se requiere acta de nacimiento del menor, acta de nacimiento de los padres (al menos uno de ellos mexicano), identificación vigente, acta de matrimonio de los padres y en el caso de que uno de los padres hubiese fallecido, presentar también el acta de defunción. Es importante también estar preparado con copias de todos estos papeles y, en el caso de la identificación, que la copia sea por ambos lados.
- Hacer una cita en el Consulado a través de CONSULMEX: todos los Consulados del país tienen la misma línea de atención al teléfono 877-639-4835. Cuando nosotros acudimos a tramitar el registro de mi bebé toda la documentación estaba completa y sin errores, por lo que no necesitamos volver; sin embargo, en la página oficial advierten que podría ser necesaria una segunda cita, si hubiera información incorrecta o llegara a faltar papelería.
Para consultar la información otorgada por el Consulado de San Antonio, visitar la página oficial.
Una vez que recopilamos toda la papelería y solicitamos la cita, mi esposo, mi bebé y yo, nos presentamos en el Consulado, ubicado en 127 Navarro St., en el centro de la ciudad. En esta ocasión no necesitamos de testigos pues el consulado apoya con ellos, pero cuando registramos a mi hijo mayor en Houston dos testigos tuvieron que ir con nosotros, así que esto es algo que varía de acuerdo con el lugar en el que estés.
Es importante aclarar que el registro es gratuito, la primera copia certificada del acta de nacimiento tampoco tiene costo y a partir de la segunda copia certificada, tienen un costo de $13 cada una.
¿Cuáles son los beneficios que mis hijos tienen?
La última vez que viajamos en avión llegamos a México como nacionales y lo mismo pasó a nuestro regreso a EEUU. Viajar por carretera también resulta más sencillo, pues ellos no tienen que sacar ningún permiso de inmigración temporal. Es un gran orgullo ser ciudadano de ambos países, pero eso no es todo.
Recientemente, la popularidad de la doble nacionalidad entre mexicanos ha aumentado pues hay quienes temen el futuro de sus hijos ante una deportación, en el caso de no tener aclarada su situación migratoria. El que los hijos nacidos en EEUU sean también mexicanos, les asegura que al tener que abandonar el país puedan tener los mismos derechos al entrar a México que cualquier otra persona, incluyendo derecho a la educación y servicios de salud. Niños que deban regresar a México podrán ir a la escuela sin ningún problema al tener la doble nacionalidad.
Obligaciones y posibles problemas
El tener grandes beneficios, también viene con grandes responsabilidades. Por ejemplo, se debe pagar impuestos en ambos países, siempre que aplique el caso.
Entre los posibles problemas, la página del departamento de estado señala que una vez que un estadounidense obtiene doble nacionalidad, Estados Unidos no podrá prestarle protección consular en el país de su otra nacionalidad.
Es más fácil obtener la doble nacionalidad de nuestros hijos en EEUU, que en México
Por último, quiero resaltar que investigué la posibilidad de realizar el registro de mis hijos desde México y, desafortunadamente, me llevé la sorpresa de que, para hacerlo, debía tener una copia certificada y traducida del acta de nacimiento, lo que consideramos hace el proceso más largo y preferimos hacerlo en el Consulado.